domingo, 18 de mayo de 2008

Las sorpresas del chat

Dando vueltas por la red me he encontrado esta noticia...amig@s...tened cuidado con quien chateais porque puede estar mas cerca de lo pensais...

Un matrimonio en crisis se divorcia al descubrir que eran amantes a través de Internet

Se querían, pero sólo a través de Internet. Al descubrir que ellos mismos eran la misma pareja en la vida virtual y real se separaron. Así lo recoge hoy el semanario serbio Zabavnik, quien asegura que este matrimonio en crisis buscó pareja a través de Internet, el problema es que se encontraron uno al otro y se volvieron a enamorar.

Crearon una dependencia que se basaba en chatear los problemas de su matrimonio. Él le contaba a su propia mujer lo que no le gustaba de su matrimonio y ella también se desahogaba con su marido, ninguno sospechaba que esa pareja cibernauta era la misma que en la vida real.

Internet logró el milagro de los desaires que vivían en la vida real a las palabras cariñosas en el chat. Él empezó a llamarla "Azúcar" y ella "Príncipe de la satisfacción" a su pareja virtual. Cuando la relación se volvió lo suficientemente seria, decidieron encontrarse, pero la reunión disipó la ilusión, ya que resultaron ser la mujer y el marido que a diario tenían graves disputas y en la práctica de ninguna manera se denominaban con nombres cariñosos. Inmediatamente decidieron divorciarse alegando el engaño matrimonial como motivo.

El semanario serbio asegura que se trata de una pareja de la ciudad central bosnia de Zenica e indica que se debería plantear ante los psicólogos por qué una pareja se lleva excelentemente por Internet y mal sin el ordenador.


http://www.elpais.com/articulo/tecnologia/Dime/quiero/solo/chat/elpeputec/20071016elpeputec_5/Tes

4 comentarios:

Lucy dijo...

¡Madre mía!
Menuda cara se les quedaría a los tortolitos...
Si es que Dios los crea y ellos se juntan...
Un saludo

lesvi's dijo...

Yo no digo ná, yo no digo ná eso lo has insinuado tuuuuuuú.

(¡¡jajajaja!! Qué fuerte me parece, "azúcar").

plumas dijo...

Anda que si nos pasa eso a nosotras, nos vamos de luna de miel porque ya sabemos que estamos hecha la una para la otra, jajaja.
Qué fuerte, ...

Anónimo dijo...

¡alucina, vecina!